Por Juan Francisco Contreras Lara.
En la actualidad la población en general ha sido convocada a observar y participar en una nueva forma de organización en donde las mujeres tienen una mayor participación a favor de su desarrollo pleno en ámbitos como el social, económico, político, educativo y sanitario; sin embargo, aún existen condiciones que reducen o cancelan los principios básicos de seguridad y pleno desarrollo de las mujeres en el mundo.
El objetivo de este artículo es el de evidenciar y concientizar sobre los efectos que tiene el maltrato y la violencia en las mujeres, los factores de riesgo y consecuencias que esta situación tiene a largo plazo para las mujeres y el entorno social en general.
Para tener una idea de la situación reciente, la Organización Mundial de la Salud menciona que por lo menos 1 de cada 3 mujeres sufren violencia física o sexual atribuible a la pareja en algún momento de su vida. Este dato es alarmante, ya que solo en México, según los datos recabados por INEGI el año pasado aproximadamente 30.7 millones de mujeres han enfrentado cualquier tipo de agresión o violencia por lo menos una vez en su vida.
En México, las tasas más altas de muertes derivadas de la violencia hacia la mujer se encuentran en los estados de Baja California, Colima, Chihuahua, Guerrero, Estado de México, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Tamaulipas y Zacatecas. Las características de las agresiones en México son diversas, pero se puede resaltar las siguientes:
- Del total de las mujeres con violencia, cerca del 50% solo fue agredida por un tipo de agresor (pareja, familiar, etc.) mientras que el restante fue agredida por diversos agresores en más de una ocasión.
- Las mujeres que se encuentran más expuestas a la violencia de la pareja o de cualquier otro agresor son las mujeres jóvenes y de edades promedio de 20 a 39 años.
- Cerca del 43.9% ha enfrentado agresiones del esposo a pareja actual o la última a lo largo de la relación.
- Existen tasas mayores de violencia emocional seguida por la violencia física, violencia sexual violencia económica o patrimonial, discriminación laboral y discriminación por embarazo.
Si bien el maltrato y la violencia tienen efectos físicos visibles, este fenómeno tiene efectos en el desarrollo de la salud física y mental en las mujeres a corto, mediano y largo plazo.
- Los efectos bien conocidos derivados del maltrato y la violencia en la mujer son:
- Transmisión de infecciones por vía sexual, incluida la infección por VIH
- Depresión, ansiedad y trastorno de estrés postraumático
- Uso nocivo de tabaco, alcohol y drogas
- Embarazos no deseados o abortos inducidos en alta frecuencia.
- Lesiones físicas
¿Qué consecuencias específicas tiene el maltrato y la violencia en la salud de las mujeres?
La organización mundial de la salud describe cuatro principales tipos de efectos o consecuencias que tiene la violencia y el maltrato en la mujer: Físicas, Sexuales, Mentales y Conductuales.
Dentro de los efectos físicos se describen las lesiones físicas agudas como moretones (hematomas) excoriaciones, laceraciones, cortes, fracturas, esguinces, quemaduras o mordeduras. La gravedad de estas lesiones puede llevar a generar discapacidad como lesiones o golpes en la cabeza, cuello, ojos, oídos, torso y abdomen. Alteraciones como síndromes de malestar o dolor crónico, malestares estomacales, son algunos efectos a largo plazo del maltrato.
Otros efectos visibles son lo generados por infecciones y/o abuso sexual: infecciones de VIH, VPH, complicaciones del embarazo o aborto espontaneas, hemorragias, infección pélvica crónica, infección de vías urinarias, etc. entre otras, también son consideradas el embarazo no planeado o no deseado, aborto seguro o inseguro y disfunciones sexuales.
Con relación al área psicológica, es posible observar que aquellas mujeres en las que ha existido maltrato y/o violencia pueden presentar una serie de síntomas o trastornos relacionados principalmente con la depresión como falta de interés en situaciones o actividades que antes disfrutaba, aumento o reducción de peso de manera desmedida, tendencia a la inactividad o fatiga constante, alteraciones del sueño, estrés excesivo o trastornos de ansiedad, autoagresión y baja autoestima, entre muchos otros.
Además de los efectos directos que tiene en la salud de las personas, existen una serie de conductas altamente relacionadas con mujeres en las que existió o existe maltrato y/o violencia:
- Uso continuo y/o desmedido del alcohol, tabaco u otras sustancias nocivas.
- Múltiples compañeros sexuales
- Elección de parejas abusivas en etapas posteriores de la vida
- Conductas de riesgo o prácticas que ponen en riesgo la estabilidad financiera, social o sanitaria de la persona (sexo sin protección, prostitución, despilfarros económicos, etc)
Finalmente, es importante destacar que los efectos visibles derivados de la violencia y/o el maltrato no tienen precisamente que presentarse en momentos inmediatos después de la agresión. Además, existe una alta posibilidad de que muchos de los síntomas y efectos se estén presentando al mismo tiempo y pueden generar un malestar mayor a corto o largo plazo.
Los efectos de los que se ha hablado en este artículo pueden presentarse en otros momentos de la vida y es preciso que si se pueden observar en una persona o en sí mismo acuda a un especialista de la salud para su atención pronta.
Referencias
Instituto Nacional de Estadística y Geografía INEGI (2017) ¨Estadísticas a propósito del día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer (25 de noviembre)¨ disponible en línea en http://www.inegi.org.mx/saladeprensa/aproposito/2017/violencia2017_Nal.pdf
Organización Mundial de la Salud (2013) ¨Comprender y abordar la violencia contra las mujeres¨ disponible en línea en http://www.who.int/reproductivehealth/topics/violence/vaw_series/es/
Organización Mundial de la Salud (2013) ¨Violencia contra la mujer Respuesta del sector de la salud¨ disponible en línea en http://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/87060/WHO_NMH_VIP_PVL_13.1_spa.pdf;jsessionid=9778A46B0F5554CA22D61CD6213AE4AD?sequence=1