DE PESOS Y CONTRAPESOS. ¿Estado fallido o fallas de estado?

Abrazos y no balazos.

Por: Raúl Paulín Rojas

La política fallida de López Obrador de no atacar a los delincuente por parte de las fuerzas armadas y los guardianes del orden ha generado un clima de inseguridad, pero sobre todo de impunidad, dando como resultado la mayor cifra de homicidios dolosos en el país. Rebasando la cantidad de 118 mil muertos en lo que va de su sexenio; la paz de López ha generado hasta el momento más muertes que todo el sexenio de la guerra de Calderón.

El pasado 21 de mayo en la Ciudad de Nueva Italia, cabecera municipal de Múgica en el estado de Michoacán, elementos del ejército mexicano decomisaron armas de uso exclusivo del ejército en su puesto de revisión a un grupo de civiles que andaban fuertemente armados, hecho que por ley ya debieron haberlos detenido.

Momentos después, un comando armado y en vehículos particulares se trasladaron a los puestos de revisión del ejército para enfrentarlos y recuperar las armas decomisadas, los elementos fueron alertados de que venían en busca de ellos, suben a sus vehículos y emprenden la retirada abandonando sus puestos de vigilancia, esto genera una persecución por parte de los delincuentes en las principales avenidas de la ciudad, los elementos castrenses son alcanzados, vejados, humillados, degradados y desarmados por la horda de criminales.

Al siguiente día en sus monólogos mañaneros el Presidente de la República justifica el acto basado en su estrategia de combate a la delincuencia con  abrazos y no balazos, llegando al cinismo de afirmar que esos actos dignifican al ejército por respetar los derechos humanos de los infractores. ¡No señor! Este acto no solamente denigra a las fuerzas armadas, vulnera la seguridad nacional e Incluso lo  pone como un Estado fallido, si el ejército no es capaz de defenderse así mismo ni preservar el  orden interno del país, no será capaz de enfrentar a un ejército extranjero para defender a nuestra amada patria,  ¡Ò querida patria¡ si osare un extraño enemigo profanar nuestras tierras, hoy te digo que tus soldados hijos no te tienen amor.

En las fuerzas armadas existen sus propias reglas de conducta, estás deben acatarse con estricto apego, y con la disciplina que caracteriza a las fuerzas castrenses.  El código de justicia militar en su artículo 356 establece que el centinela (y por ampliación, al militar que cubre un servicio de armas o puesto de control) y que no lo defiende hasta repeler la agresión o perder la vida se le juzga con la pena de muerte, “en estos tiempos de paz”,  y por el hecho de haber sido abolida de nuestra Constitución se les debe de aplicar la pena de prisión en sus instalaciones militares.

En el mismo código, en su artículo 118 está tipificado como delito de encubrimiento al elemento que favorece a los delincuentes, aún sin previo acuerdo con ellos, y de acuerdo a su encargo o comisión. El Presidente de la República, en su calidad de comandante supremo de las fuerzas armadas debiera ser juzgado por este delito.

Damián Carmona, ejemplo a seguir.

En tiempos de la invasión francesa y encontrándose combatiendo en el sitio a la ciudad de Querétaro y como parte del quinto batallón de San Luis Potosí y comandado por el general Julio M. Cervantes;  José Cosme Damián Carmona Ortiz, un gran potosino que sin tener un alto rango militar y estando de centinela dio un alto honor a las fuerzas armadas originando con su acto que se estableciera el día del soldado. Este ejemplar Potosino nació en calabacillas San Marcos, Mexquitic San Luis Potosí el 27 de septiembre de 1845.

Pues bien el 27 de abril de 1867 a la edad de 21 años, estando de guardia en el cuartel el cimatario en la casa de matanza ( hoy la plazuela de Damián Carmona) a un costado del mercado de la cruz, en dicha trinchera cae a escasos metros de el una granada de fragmentación lanzada por los imperialistas de la cruz,  estallando está, arrebatándole el fusil y destrozándole el brazo que lo sostenía, así como algunas otras lesiones.

 Una vez pasada la confusión y la humareda que levanto el estallido y sin moverse un centímetro de su guardia nuestro héroe potosino grita.

“¡Cabo de cuarto!”.

Recibiendo por respuesta

“¿Qué ocurre?”

Replicando este.

“Estoy desarmado”

Continuando firme en su responsabilidad asignada.

Sus compañeros le llevan otro fusil y este continúa incólume.

Alguien de la tropa da aviso a su superior de lo acontecido y enterado de esto el general Verástegui  se traslada de inmediato al lugar asignado a Carmona, llegando este y al mirar la escena le dice.

Por su acto, por la serenidad y el valor que llenan de gloria a los hijos de San Luis en este momento lo asciendo a cabo.

 La historia del valor y lealtad a la patria de este valiente potosino lo deberían de recitar en los cuarteles militares en estos momentos aciagos, pero sobre todo que la doctora en historia Beatriz Gutiérrez Müller  instruya a su marido sobre la vida y obra de este valeroso soldado para que reflexione sobre su estrategia de abrazos y no balazos e incline la cabeza ante la figura de este digno soldado hijo de la patria.

Todo está perdido cuando los malos sirven de ejemplo y los buenos de burla. Demócratas. 

Los contrapesos de historia son irrefutables.

 

 

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: